Las Meninas, del cuadro de Velázquez al cómic
En 2015 el cómic Las Meninas de Santiago García y Javier Olivares fue reconocido con el Premio Nacional de Cómic, después de obtener decenas de premios por especialistas en el medio.
Este cómic recorre la historia de un artista como Velázquez para explicar cómo gracias a su arte fue capaz de pintar un cuadro tan icónico como el del Retrato de la familia de Felipe IV, mucho más conocido como Las Meninas.
En el libro dibujado por Javier Olivares plantea dos grandes líneas temporales: la del tiempo de Velázquez y la de las influencias posteriores del cuadro de Las Meninas.
Velázquez, el arte de la pintura
“Recuérdalo, Diego. Recuérdalo. No es un oficio. Es un arte”.
En una de las primeras viñetas Velázquez se enfrenta al majestuoso lienzo. Reconoce que está en lo más alto de su carrera, que ha aprendido todo lo que podía saber de la pintura.
Él es un maestro, sabe que su trabajo no es mecánico, como creen los ignorantes que no entienden cómo se realiza una pieza artística.
Él es un artista que va a crear la obra maestra que lo inmortalice, que lo iguale a los pintores que admira.
Esta idea de que Velázquez era un artista es recurrente a lo largo de las páginas. Cuando un caballero de la Orden de Santiago les pregunta a los artistas contemporános, como Murillo o Alonso Cano, sobre el oficio de Velázquez, estos responden que no practicaba el oficio de pintor, sino el arte de la pintura.
La vida de Velázquez en viñetas
Para entender cómo llega Velázquez a ser el mejor artista de su tiempo, en Las Meninas se dibujan los diferentes momentos de su vida: su aprendizaje con Pacheco, su llegada a la Corte, su entendimiento con el gigantesco Rubens, los viajes a Italia…
En casi todos los episodios vitales hay un encuentro entre el maestro sevillano y la pintura, con el diálogo con los maestros de su época y la observación del trabajo de los anteriores, con la enseñanza en Sevilla, con el desafío desigual frente a los otros pintores del rey.
Sólo así Diego da Silva se puede convertir en el universal Velázquez.
El icono de la pintura de Las Meninas
El cómic de Las Meninas pone de manifiesto que la obra maestra de Velázquez, hoy en el centro del Museo del Prado, se convirtió en un icono absoluto.
La genialidad del sevillano consistió en reflejar al rey en un espejo, no pintarlo, cuando el monarca ya no quería ser retratado. También fue una maravillosa ocurrencia la de situarse como creador dentro del cuadro, no como aposentador de palacio junto al resto de funcionarios de la corte, sino como pintor ejerciendo su labor.
Los otros pintores sabían que era un hito prácticamente insuperable. Así se aprecia en la obsesión de Picasso, desde su primera impresión al ver el cuadro en su adolescencia al casi centenar de versiones que realizó hacia el final de su vida, hoy presentes en el Museu Picasso de Barcelona. O la posición de Goya frente a Velázquez como pintor del rey, sabiendo que su Familia de Carlos IV toma como referencia las Meninas, pero que es imposible que la aventaje.
Estos incomparables maestros aparecen por las hojas de Santiago García y Javier Olivares, junto a otros como el Equipo Crónica o Salvador Dalí.
La admiración de la composición del cuadro trascendió a la pintura. Foucalt o Buero Vallejo también hacen su particular homenaje de una de las mejores obras de la Historia del Arte universal.
Las Meninas, una obra maestra, también del cómic
En definitiva, el cómic de Las Meninas explica la importancia de la obra maestra de Velázquez. Lo hace ilustrando cómo se concibió tomando los referentes en los cuadros, cómo sólo del pincel de Velázquez podía haber surgido una pieza tan admirada, tanto por artistas como por el público que se queda embobado frente a ella en las salas del Museo del Prado.
Cómic Las Meninas, de Santiago García y Javier Olivares, en Astiberri
Artículo realizado para la jornada del Orgullo Barroco de 2020, la fiesta del arte en las redes sociales.